Cuando Listín Diario
lo avistó caminaba con dificultad por la acera de la calle que tiene de nombre Lucas Zapata, en San Luis, por Central Ozama. Se apoyaba de un andador con las ruedas casi destruidas como si su vida dependiera de eso. Y así era, le permitía moverse, pero también le recordaba las limitaciones físicas que enfrenta a sus 80 años, con una pierna rota que le causa dolor y no puede ser amputada por su edad. ( Seguir leyendo…
)
¿Tú que opinas? Cuéntalo aquí: